Presión de los neumáticos para tu coche

La presión de los neumáticos incide en las prestaciones y la fiabilidad del vehículo. Por eso es importante saber cuál es la presión recomendada para cada neumático y tipo de vehículo y cómo comprobarla. En este artículo te explicaremos todo lo que necesitas saber.


Presión de los neumáticos


Cómo comprobar la presión de los neumáticos

Antes de ver cómo medir la presión, es preciso saber cuál es la presión recomendada para tus neumáticos. Este valor dependerá del tipo de vehículo (no es lo mismo un coche urbano que un coche deportivo o un SUV), la cantidad de pasajeros y la carga, es decir, el peso que deberá soportar el neumático.


Toda esta información puedes encontrarla en el manual del vehículo y, a veces, también en una pegatina en el marco de la puerta del conductor y en la tapa del tanque de combustible.


La tabla de presión de neumáticos te indicará la presión recomendada en cada caso en libras por pulgada cuadrada (pound per square inch o psi) o en bares (bar). La unidad que te servirá para seguir las indicaciones de este artículo es el bar.


Una vez que hayas consultado esta tabla, la recomendación es que midas la presión de sus neumáticos en frío, es decir, cuando el vehículo no haya rodado más de 4 o 5 kilómetros, ya que cuando el neumático se recalienta, los valores pueden salir alterados.


Los comprobadores de presión de neumáticos pueden ser tanto digitales como manuales. Es posible comprar uno de estos aparatos para medir la presión de los neumáticos para llevar en el coche, o bien dirigirse a una gasolinera, donde en general tendrán un medidor. En este último caso, es importante verificar que se encuentre bien calibrado.


Para medir la presión, sigue estos pasos:

  1. Quita el tapón de la válvula del neumático y coloca la boquilla de la manguera del comprobador en ella, asegurándola (en los casos en que la manguera incluya un prisionero o una pestaña que ajustar).

  2. Lee el resultado y, si fuera más alto que el recomendado, toca el obús para que salga el aire excedente o, si te encuentras en una gasolinera, presiona el botón (-) del medidor.

  3. Si la presión es más baja que la recomendada, infla el neumático cuanto fuera necesario.

  4. Vuelve a colocar el tapón de la válvula del neumático.


¿Cada cuánto revisar la presión de los neumáticos?

Teniendo en cuenta que los neumáticos van perdiendo presión con el andar, es recomendable revisar la presión regularmente, al menos una vez al mes.


Si los neumáticos tienen menos presión de la recomendada, se desgastarán de forma irregular, aumentará el consumo de combustible, así como la distancia de frenado, y podrían incluso producirse pinchazos y e fecto de aquaplaning.


Si, en cambio, los neumáticos tienen más presión de la recomendada, se desgastará más rápidamente la parte central de la banda de rodadura y se verá afectada la amortiguación, lo que reducirá el confort en la conducción.


PREGUNTAS FREQUENTES

¿Cuál es la presión para neumáticos de un coche cargado?

Si bien, como ya hemos dicho, la presión recomendada dependerá no solo de la carga sino también del tipo de vehículo y de la cantidad de pasajeros que transporte, en líneas generales se recomienda una presión de entre 2 y 2,5 bares para vehículos sin carga y entre 2,4 y 2,9 bar para vehículos cargados.


No obstante, reiteramos: estas medidas son solo indicativas. Deberás consultar las presiones recomendadas para tu vehículo específico.


¿Cómo interpretar la tabla de presión de neumáticos?

La tabla de presión está dividida en varias columnas e indica la presión recomendada tanto para los neumáticos delanteros como para los traseros, en situación de “uso normal” y en situación “de carga”, junto con la cantidad de pasajeros que transporte el vehículo. La presión recomendada estará indicada en kPa (kilopascales), bares (bar) y libras por pulgada cuadrada (psi).


¿Qué hacer si mi coche lleva remolque?

Si el vehículo lleva remolque, es preciso aumentar la presión de los neumáticos traseros hasta 0,4 bares (en frío) con respecto a la presión de “uso normal”.


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